En la mayoría de las organizaciones, entornos, mercados, se habla de una necesidad imperiosa de innovar, de ser innovador, de establecer hábitos, rutinas y habilidades de cambio constante. Y también en la mayoría de esos mismos entornos, se acepta de manera generalizada que la organización debe abrazar este nuevo paradigma de la manera más rápida posible, casi como la única opción. Y esta urgencia no es para mantener su ventaja competitiva, sino para poder sobrevivir en el actual contexto económico, social y empresarial tan volátil. No obstante, a pesar de que las ideas están claras, a estas alturas en muchas organizaciones no se ha hecho un esfuerzo formal por cumplir requisitos fundamentales para poder innovar.

Para una organización ser innovadora, en primer lugar, debería facilitarse que a lo largo y ancho de esta se entendiese y asumiese qué realmente significa la innovación y cómo debe abordarse en su día a día. En segundo lugar, una vez hayamos comprendido de manera profunda qué implica toda esta situación para nuestra organización, debemos ser capaces de llevar esto a iniciativas y en proyectos concretos, sólidos, estables y con ciertas posibilidades de éxito. Para esto se necesita un método formalmente establecido y que permita establecer un código común a la hora de innovar.

De igual forma, ninguna organización se hace innovadora de la noche a la mañana. Y sobretodo, ninguna lo hace sin saber por qué, sin estar convencida de lo que hace, sin tener un mapa de las implicaciones, de los esfuerzos que ha de tener que hacer, de los retos que va a tener que resolver, de los resultados que puede esperar, de cuánto tiempo deberá empujar el proyecto hasta poder decir que lo está consiguiendo. Es por ello, que una sistematización del proceso de innovación debe ser una prioridad.

• Entiendan a fondo el nuevo entorno, así como los retos, implicaciones y necesidades de acción que esto conlleva para su organización en concreto.
• Adquieran la capacidad de evaluar su organización en términos de innovación y diseñen un modelo para su transición hacia una estructura adaptada al nuevo entorno.
• Cuenten con las directrices y pautas para poder implantar exitosamente un modelo de innovación en sus organizaciones.

• CAMBIO ESTRATÉGICO Y EL MINDSET DE LA INNOVACIÓN

  • Del mundo VUCA al mundo BANI.
  • Una época de extraordinaria aceleración.
  • La Cuarta Revolución Industrial: Implicaciones para las organizaciones.
  • Los cambios en la demanda y en los hábitos de consumo: análisis.
  • Los nuevos conceptos, las tendencias de cambio tecnológico.
  • La tecnología como herramienta, no como objetivo.
• CÓMO PONER A TRABAJAR LA INNOVACIÓN

  • Innovación, ¿Qué es y cómo se implementa?
  • Autodiagnóstico: ¿Su organización está preparada para ser innovadora?
  • ¿Se necesita un departamento de innovación?
  • ¿Cómo organizar los recursos? Y sobretodo, ¿Cuántos recursos necesito para innovar?
  • ¿Cómo empezar, medir y celebrar los resultados de la innovación?
  • Democratizando la innovación: ¿Cómo ponerla al servicio de todos?
  • Casos, ejercicios y dinámicas.
• LA INNOVACIÓN EN LAS PERSONAS Y LOS EQUIPOS

  • Las personas, en el centro de cualquier proyecto como máxima prioridad.
  • Las necesidades de formación, información e inteligencia.
  • Elementos de una cultura innovadora: La gestión de la incertidumbre, el riesgo y el fracaso.
  • Casos, ejercicios y dinámicas.
• DISEÑO Y DESARROLLO DEL MODELO DE INNOVACIÓN (PEER REVIEW)

  • ¿Qué necesitamos, qué tenemos, qué debemos desarrollar?
  • ¿Por dónde empezamos? Organización de los primeros pasos, acción inminente.
  • Herramientas y recursos disponibles.
  • Compromisos: El proyecto de exploración.
  • Casos, ejercicios y dinámicas.

JOAN PIQUÉ